Este año, sin duda alguna, uno de los mayores desafíos para las empresas será la ciberseguridad. Los cambios que se han generado por la digitalización han incrementado los riesgos cibernéticos.
Estadísticas del Threat Intelligence Report de Check Point detectaron un crecimiento de alrededor del 65 por ciento en los ataques durante los últimos 6 meses del 2020 en el país. Este reporte contabilizó 1,012 ataques a organizaciones de forma semanal en junio y al cerrar el mes de noviembre ya eran 1,673 ataques semanales.
Además, los expertos predicen varias tendencias con respecto a los ataques de phishing, ransomware, amenazas a la seguridad por el teletrabajo, servicios remotos y la nube, aumento de ataques a través de dispositivos móviles, inconvenientes relacionados con el Internet de las Cosas (IoT), entre otros.
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Durante el 2020, los tipos de ciberataques que más crecieron fueron la ingeniería social y el phishing. En el caso de Guatemala, los ataques más comunes durante el 2020 fueron:
- Campañas de phishing (técnica que consiste en engañar a los usuarios para robarle información confidencial)
- Troyanos de tipo bancario (es un malware que busca robar datos bancarios de los usuarios)
- ProxyChanger (un código malicioso que impide a usuarios acceder a sitios web, para redirigir el tráfico a otras direcciones).
“Es una situación complicada para las empresas ya que cada día los ataques se vuelven más sofisticados, por lo que, tener uno o dos controles de seguridad, no es suficiente para protegerse”, indicó Erick Montenegro, gerente senior de servicios administrados de Tigo Business.
Un ecosistema de seguridad
Cualquier empresa que brinde servicios críticos o que represente un potencial importante para lograr un beneficio económico significativo, se convierte en un blanco atractivo.
“En definitiva, este 2021 habrá una mayor exposición a los riesgos cibernéticos porque la digitalización de las empresas continúa y las prácticas como el trabajo remoto han venido para quedarse”, indicó Montenegro.
Está claro que, debido al teletrabajo, las redes domésticas, el software de trabajo remoto y los sistemas en la nube seguirán siendo el centro de ataques masivos; especialmente para los usuarios que acceden regularmente a datos sensibles como los profesionales de recursos humanos, directores comerciales o altos ejecutivos, estos serán los que corran mayor riesgo.
Con todo esto, la tendencia ahora es que las compañías contratan equipos de seguridad informática y proveedores expertos para revisar las políticas y sistemas de protección en entornos híbridos en los que el trabajo y los datos personales se encuentran en un solo dispositivo o varios.
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Ante esta realidad y nuevas tendencias en ciberseguridad, los líderes estratégicos y profesionales de TI también deben asegurarse de que las medidas que se han tomado para mantener la información en línea sean seguras y que el plan de ciberseguridad establecido les permita responder a posibles incidentes y detectar amenazas de forma efectiva.
“Los servicios administrados de Tigo Business ofrecen un respaldo garantizado, una mejora continua de los servicios de TI, confianza y continuidad de los servicios ante ciberataques con un soporte local 24/7 por ingenieros expertos y con múltiples certificaciones”, puntualizó Montenegro.
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