Opinión
La experiencia de conocer a la Guatemala exportadora
Si alguna vez recibe una invitación para formar parte del jurado que tiene la responsabilidad de participar en el Galardón Nacional a la Exportación que año con año organiza AGEXPORT, acéptela. Es, probablemente, el mejor espacio para conocer al país y su gente, desde el trabajo, la innovación, el compromiso, el entusiasmo y la pasión por hacer bien las cosas.
Este año participé como parte de ese jurado y cada una de las empresas que tuvimos la oportunidad de conocer, representan la cara positiva de Guatemala, la cara a la que todos tenemos el derecho a conocer y el deber de compartir, la cara que pone resultados en la mesa, genera empleo y lleva en alto a Guatemala.
¿Lo mejor? Estrechar las manos de los gerentes, de los operarios y de quienes nos atienden en las recepciones. Mirarlos a los ojos y ver en ellos el orgullo que produce la labor diaria y salir de esos lugares con una certeza, aún más firme: el sector exportador es el que más oportunidades le abre al desarrollo de los guatemaltecos.
Al final, todos y cada uno de los que se postulan merece un fuerte aplauso y todos y cada uno de los que no lo hacen, también.
El aplauso se lo han ganado quienes le apuestan a aumentar la capacidad de sus colaboradores, a encontrar las soluciones en medio de las crisis y a mejorar la calidad del producto que elaboran para el mercado nacional y el internacional.
Mi más sincero agradecimiento a AGEXPORT por la oportunidad de conocer la experiencia de la Guatemala exportadora, a quienes tuve como compañeros en el jurado (no fue fácil llegar a una decisión con tanto talento, tanta innovación y tanto compromiso en las empresas, ¿verdad?), y quienes (esto lo aprendí de uno de los líderes que participaron este año), confían en el producto guatemalteco más allá de las fronteras de este gran país.
Este artículo fue publicado originalmente en la edición impresa 292