Una de las carencias recurrentes para emprender es el capital inicial. César Tánchez, maestro certificado de finanzas personales por Crown Financial, ofrece en este artículo diez pasos para empezar un negocio sin descuidar la economía.
Por: César Tánchez – autor del libro Más Rápido y Más Lejos en sus Finanzas Personales
1. Toma papel y lápiz y anota toda idea que venga a tu cabeza. Anota el mayor número de ideas posibles de negocio, sin preocuparte por su factibilidad o sentido común. Permite a tu mente total libertad.
2. Depura tus ideas. ¿Cuáles ideas tienen más factibilidad de realizarse? No elimines ninguna, solo prioriza enumerando. Considera tu conocimiento sobre la idea, capital, el tamaño del mercado, etcétera.
3. Enfócate. Ahora concéntrate en una sola, al menos por ahora. No hay ideas malas, sólo que nuestra atención estará en una.
4. Realiza un test SIN dinero. Ve a la calle a vender el producto o servicio ¡que aún no tienes! Esto te mostrará: que venderlo no será tan fácil como pensabas o que tienes un diamante en bruto. Si es lo primero, dale una oportunidad a la idea número dos de tu lista.
5. Elabora un plan de negocios. Elabora la idea por escrito de tal modo que si la leyera un inversionista potencial estuviera ansioso por unirse inmediatamente a tu causa.
6. Planifica tu plataforma de venta. Tanto la física como la digital, la tecnología nos permite exponernos de una forma más eficiente, con más alcance y bajo costo.
7. Establece tu presupuesto. La decisión más sensata es emprender con base en tus ahorros. Si lo haces con un préstamo, no uses las tarjetas de crédito para ello, pocos negocios tienen una rentabilidad tan alta como los intereses de estos instrumentos. Evita hipotecar tu patrimonio, si el emprendimiento falla, puedes perder ambos.
8. Empieza con poco. Cuando iniciamos tenemos conocimientos limitados, nuestra experiencia es reducida. Demos tiempo a nuestra curva de aprendizaje y así reducir los riesgos con decisiones sensatas.
9. Ten paciencia. Un emprendimiento toma tiempo, la paciencia es la compañera inseparable de viaje.
10. Toma decisiones como administrador y no como dueño. Un dueño tiene apego emocional, mientra que un administrador no. Cuando tengas una decisión difícil pregúntate: ¿qué haría un gerente experto? Te dará otra perspectiva.